¿Es bueno consumir soja?
Desde todoespelta pensamos que la alimentación debería estar basada en la espelta como alimento base, igual que ha estado durante siglos basada la cultura europea en los cereales como el trigo y el centeno. No obstante, como nuestros lectores nos han pedido la opinión de otros alimentos vamos a empezar a hablar de ellos de vez en cuando a la par que seguimos hablando de la espelta. Hoy empezaremos con la soja.
En un momento en el que la reducción del consumo de carne es cada vez más aconsejado por los profesionales de la salud y del medio ambiente, el consumo de la soja no para de aumentar. La soja es una legumbre, es decir, pertenece a la misma familia que las lentejas, las judías y los guisantes. Hoy en día se consume en varias formas: soja cocida, germinada, en aceite, tofu, yogur, leche, harina…
Pero, ¿cuáles son sus beneficios? ¿Existen riesgos al consumirla?
La soja es muy rica en proteínas vegetales de buena calidad y, por lo tanto, se ha convertido en el alimento favorito de vegetarianos y veganos. La proteína de soja contiene todos los aminoácidos esenciales en la proporción correcta y es fácilmente digerible.
Sin embargo, hay que resaltar que la soja no tiene el mismo contenido proteico se ingiera de una forma o de otra. Aquí está el valor proteico por cada 100g de producto:
Harina de soja 45g
Tempeh 19g
Tofu 12g
Miso 12g
Soja cocida 12g
Yogur de soja 5g
Leche de soja 4g
Como veréis a través de esta lista, ni la leche de soja y el yogur de soja nos aporta mucha proteína.
Las isoflavonas, tema de debate sobre el consumo de soja
La soja contiene isoflavonas, una sustancia de la familia de los fitoestrógenos, que se comporta como las hormonas femeninas (estrógenos). Estos fitoestrógenos pueden entonces interferir con el funcionamiento de nuestras hormonas y competir con ellas al unirse a algunos de sus receptores. Por eso este tema es objeto de debates en cuanto a salud se refiere. Hay estudios que dicen que son muy buenos para las mujeres y otros dicen que no tanto.
La soja y el impacto en el medio ambiente
Hoy en día, el 85% de la soja del mundo se utiliza como alimento animal. Dos tercios de la producción mundial está compuesto por organismos genéticamente modificados (OGM), que alteran el equilibrio ecológico mundial. Además, los cultivos de soja dependen en gran medida del uso de fertilizantes y pesticidas, incluido el glifosato, cuya toxicidad es ampliamente criticada. De hecho, el glifosato contamina los suelos y los ríos y causa problemas de salud en las poblaciones locales. El cultivo de soja también es responsable de gran parte de la deforestación de la selva amazónica en Brasil.
¿Qué hacer entonces con el consumo de soja?
Hoy en día, el consumo moderado de soja no es un problema y varios estudios demuestran los beneficios para la salud de este alimento. Aunque las tasas aún no están suficientemente claras, es aconsejable limitar el consumo de soja a 3 productos por semana y 1 producto por día. En particular, es recomendable limitar su consumo para los pequeños, especialmente los varones, y para las mujeres embarazadas y lactantes.
Es aconsejable favorecer las formas fermentadas (miso, tempeh). De hecho, el proceso de fermentación reduce la presencia de compuestos vegetales que reducen la absorción de nutrientes en el sistema digestivo.
Por último, dadas sus graves consecuencias medioambientales, es importante favorecer la soja ecológica producida en España.